Hay que haber tenido la cabeza enterrada debajo de la arena unos cuantos años para no saber de uno de los fenómenos que azotan o bendicen al gaming estos días: el lootboxing. Desde luego, es un concepto controvertido, sobre el que se ha hablado ya bastante. Tanto creadores de contenido serios en YouTube u otras plataforas, como simples espectadores del mundillo han expresado ya sus opiniones más que de sobra, y de hecho el debate todavía sigue vivo hoy día. La mayoría de los juegos más populares del momento, por lo menos a nivel comercial, implementan el sistema de «cajas» de una forma u otra. Podríamos empezar por Fortnite, FIFA u OverWatch, pero no creo que tenga mucho sentido extender esta lista ya que podríamos estar horas nombrando juegos.
Me gustaría hacer un análisis de la situación un poco más profundo de lo que podría resultar un Tweet poco pensado de alguien eufórico o enfadado tras desembolsar el dinero correspondiente en abrir una de estas tentadoras cajas de unos y ceros y abrirla. De cualquier manera, la objetividad no existe, eso lo deberíamos saber ya todos, y yo voy a estar sesgado a la hora de escribir este artículo de opinión, pues no deja de ser mi opinión… pero voy a intentar hacer un recorrido lo más completo posible por los aspectos positivos que pueda aportar el lootboxing, los aspectos negativos, diferentes juegos donde se implemente de maneras diversas, etc.
¿Qué es el lootboxing?
Aunque la mayoría ya sabéis en qué consiste, probablemente fruto de un contacto directo con el sistema de cajas de algún videojuego, nunca está de más definirlo. El fundamento del lootboxing reside en que el jugador abra lo que se conoce como cajas, en inglés también se suele usar el término crate o case, además de la traducción literal box, cajas que contienen objetos, recursos, consumibles o mejoras aplicables al juego. El problema aquí es el factor azar, aderezado con un poco de estadística y probabilidad, y es que lo que el jugador recibe al abrir una es aleatorio. En vez de comprar el campeón en el que se ha fijado nuestro inocente sujeto por el precio indicado, sea moneda del propio videojuego o moneda de curso legal, lo que va a recibir es una de las recompensas aleatorias que contiene dicha caja.
Las recompensas suelen ir clasificadas por categorías. Generalmente, existe un grupo más o menos amplio de ítems de baja categoría, cuyo precio o valor es sustancialmente menor que el valor de la caja que los contiene, y un grupo más pequeño de valiosas recompensas, que tiene un valor muy elevado. No hace darle muchas vueltas para darse cuenta de que, al igual que pasa en cualquier otro tipo de lotería, la probabilidad de que obtener una recompensa de categoría alta o incluso media, es bastante escasa.
De lo que he explicado en los dos párrafos anteriores, os podéis imaginar ya cuál es el motivo de la controversia: las cajas se compran. Las cajas suponen una fuente de dinero para la entidad que comercializa dicho videojuego, sea el estudio, la distribuidora, etc. Y esto no es necesariamente malo, mientras que para algunos el mundo del videojuego es un hobby, para otros tantos es una industria, es una forma de ganarse la vida tras tantas horas dedicadas a sacar un proyecto audiovisual adelante. Pero qué tendra el dinero, que siempre que hay importantes sumas de por medio, suele haber malas prácticas. Por esto precisamente debemos tener cuidado… ¿Es una práctica legítima el incluir lootboxing en los videojuegos?
Con menuda pregunta nos hemos encontrado. Algunos países, ya han encontrado su respuesta, y es que por ejemplo en Holanda se considera una práctica ilegal, o por lo menos hasta cierto punto, desde el año pasado. La situación es complicada y poco consistente, se han tomado acciones legales contra algunas compañías mientras que otras siguen manteniendo su sistema de cajas impunemente. De cualquier manera es una pregunta compleja. Es importante conocer ciertos factores antes de juzgar. Por ejemplo, ¿qué ganamos abriendo cajas? ¿Se trata de mejoras estéticas solamente, o influye en la calidad de nuestro gameplay? También podríamos preguntarnos, ¿es la única forma de financiar el videojuego?
Como véis, esto va para largo, así que dividiré el artículo en varias partes. Si os interesa esta línea de opinión, mostrad vuestro interés en los comentarios para alimentar el debate, y para que escribamos las siguientes secciones más pronto. Esto es todo de momento, un saludo y hasta pronto, queridos lectores.